Hace poco me ha entrado el veneno de cambiar de domicilio, un impulso, pasé cerca de paso aun bar por la obra a punto de rematar ya de unos pisos nuevos muy bien ubicados en una zona que siempre nos ha llamado la atención a mi y a mi mujer...bueno hasta ahí todo bien, lo normal vaya, miro en Internet para ver la promoción, planos, precios y tipos de piso en venta...
Yo para todo soy muy intenso la verdad y si vi el piso sin querer el lunes el miércoles ya tenía montada la película y estaba vendiendo mi casa en los portales de Internet, y el jueves tenía cerrada hipoteca con el banco por si me tenía que meter rápido (quedaban pocos pisos de esa promoción). Esto es para poneros en contexto de la anécdota que viene a continuación jijijiji.
El mismo viernes tocaba sondeo a la promotora que vende esos pisos, y fui con la familia a ver piso piloto y sentarme a ver que pisos tenía a la venta y que precios manejaban. Bien, os describo al protagonista de la anécdota...El vendedor Cabrón..., un hombre a punto de jubilarse gordo, calvo y con cara de perro pachón, no diré nombre ni de la zona ni de él por respeto pero el que viva por Sevilla se puede hacer una idea jajaja no me extrañaría que le llegara incluso a él jajajaja. La descripción física es lo fácil de aquí, el meterte con el aspecto de alguien es humor fácil, para nada de mi estilo ha sido sólo por desahogarme la verdad. Vamos al turrón el tío es un tiburón de la venta que lo tienen allí desde que Jesús era aprendiz de carpintero con aspiraciones a charlatán, que viene de vuelta de todo y que no se muy bien si la dejadez y lo desagradable era parte de su papel o directamente le daba todo igual ya porque había hecho números de lo que vale echarle y lo que le quedaba para jubilarse y ganaría de todas todas.
El tipo, empezó a hablar como si no hubiera un mañana de que lo que le quedaban eran pocos pisos y con muy mala situación (les daba poco sol y tenían mala distribución), pero tenía algo hipnotizante en lo que decía que mientras más trabas me ponía loco porque me levantase de allí más ganas tenía de mudarme al puto piso, cada vez que intentaba hablar él me cortaba inmediatamente y sin disculpas, como haciéndolo queriendo el hijo de puta, y yo, por educación y algo de falta de costumbre de encontrarme gente así, me quedaba callado y en un momento dado miré a mi hija de diez años quien me devolvió la sonrisa cómplice como diciendo ¡¡¡papi este no te deja meter baza!!!.
No sé si os habéis encontrado alguna vez un perfil parecido, pero son como los típicos profesores déspotas que visten con chaleco de rombos y pantalón gris acampanado y corto de tramo con muy mal pelaje y muy desorganizado pero que hablando es una puta eminencia, como superdotado pero con el pene pequeño...que esa es otra no os pasaba que cuando te enterabas de niño que tenías algún compañero superdotado le empezabas a preguntar tonterías como la capital de luxemburgo?...bueno esto para otra anécdota ajjajaja.
En fin el vendedor cabrón no me dejó meter ni una palabra, ni contarle mi situación personal en la que tenía que vender para poder comprar, etc...etc...ni de que dinero disponía ni nada que se le parezca, cierto es que me metí en esa oficina a las 19.38 y cerraban a las 20.00 igual algo tenía que ver con las prisas. Lo cierto es que me maltrató psicológicamente y seguramente sin darse cuenta se creó un enemigo de por vida, os cuento un poco yo soy el típico que si me haces alguna guarrada en la carretera te persigo y te lo hago saber al punto de que si me sacas un dedo no tendrás gasolina suficiente ni sitio lo suficientemente lejos para que yo deje de perseguirte, un mal gesto es suficiente soy un enfermo que le hago...pues el vendedor cabrón había conseguido despertar en mi ese veneno de pique extraño donde tenía claro que esto no podía quedar así pasase lo que pasase y me mudase allí o no, me levanté con dos panfletos pintarrajeados por el vendedor cabrón (también me irritó sobremanera, coño si es para mi a que viene pintar un armario imaginario ¿tú que coño sabes donde yo voy a ponerlo cabrón?) y me fui de allí con mi familia con cara de pocos amigos.
Donde todo el mundo actuaba normal como si de un día cualquiera se tratara yo ya tenía la mirada tipo Clint Eastwood como perdonándole la vida diciendo para mis adentros gordo cabrón calvo has ganado esta batalla pero perderás la guerra dalo por hecho. Todo esto en voz de off (claro está) y mirándole fijamente asintiendo con la cabeza jajajajaja, seguramente si algún día lograra saber que pensaba ese hombre entonces me reiría aún más de mi patetismo...estoy seguro de que era una guerra mía inventada como casi siempre al más puro estilo quijotesco.
Lo comenté con mi mujer y los niños, no sabía muy bien si era táctica de venta mostrar desinterés por vender ya que nosotros somos los que fuimos a la promotora para vendernos los pisos más atascados y que menos salida tenían o simplemente tenía claro que la zona era buena y la iba a vender sin esfuerzo, pero la verdad es que nos bajó un poco de la nube con tantos números, IVAS e historias que hacían si cabe aún más difícil todo esto de mudarnos, que si había que ponerse al corriente de cuotas con los otros inquilinos que si la firma era en diez meses que si no podía comprometerse a que mañana iban a quedar los mismos pisos en venta que hoy...una locura pero sea como fuese le salió bien comercialmente hablando la verdad sea dicha al gordo lo que es del gordo.
Este fin de semana ha sido intenso, ya que por lo que pudiera pasar hemos empezado a mover pieza limpiando la casa, tirando cosas que se habían estropeado de los patios y azoteas, convenciendo a los niños de las ventajas de vivir en la nueva zona, no quieren irse ni muertos de su casa en especial el mayor, atendiendo a diez mil inmobiliarias para la venta de la casa, haciendo fotos para colgar en los anuncios de Internet...una locura, vamos que decidimos que lo vamos a intentar sin más historia que si sale bien y si no también, ya que estamos muy bien en nuestra casa la verdad pero ganaríamos otro tipo de cosas como cercanía a la familia o a Sevilla que la teníamos algo olvidada siendo nosotros criados en Sevilla ya ni íbamos a la feria con eso lo digo todo.
Vale el lunes llamé a nuestro protagonista para hacerle saber que esto sólo acaba de empezar y que no había logrado disuadirnos con su actitud desagradable como que le estábamos hacer perder el tiempo. Le dije mira queremos afinar los pisos que quedan en las tres fases en venta y los plazos de entrega y ver las diferentes opciones en precio y planos para tener claro cual respondía mejor a nuestras necesidades...lo normal en un mundo normal pero no en el mundo de este vendedor cabrón claro...su respuesta fue de nuevo desagradable..."vale Francisco pero mañana martes tengo la firma de uno de os que te enseñé y no voy a tener tiempo de atenderte, ¿podríais pasar el miércoles?", a lo que le dije que si que no era problema.

Bien el miércoles llegué de trabajar decidido a visitar al vendedor cabrón, mi mujer no entendía muy bien para qué ya que aún estaba por vender la casa y tampoco le había gustado el trato del vendedor cabrón pero sólo yo sabía la guerra que tenía por dentro y la espinita bien clavada adentro que me había sutilmente introducido el vendedor cabrón. Me vestí informal pero arreglado como el día del mango en Málaga pero más informal, el mensaje que quería trasmitir era de seguridad entiendo a la par que desinterés como si acabara de salir de trabajar solo que más guapo jajjaja. todo estaba diseñado para que fuese perfecto pero casual o descuidado, si de verdad fuera descuidado iría con mis J'haybers y un chándal Adidas de hace tres años.
Decidí ir sólo para explayarme y medirme sin la presión que supone tener al lado a mi mujer y mis hijos y cogí el mejor de mis coches (el de mi mujer jaja no podía ser de otra manera) comí si este gordo lo fuese a ver dentro de su oficina de casetilla en medio de un descampado. Entré decidido a hacerlo sentir incómodo desde el principio dando un portazo al cerrar y con paso firme lo saludé nombrándolo por su nombre y en tono alto, ese gordo mirando el portátil (a saber que estaba mirando os lo dejo a vuestra imaginación perturbada) con las gafas de cerca en la punta de la nariz de estas que se abren partiéndolas por la mitad que ya solo con ese gesto había ganado el primer asalto y me dice pasa Francisco siéntate.
Empiezan las hostilidades, me dirijo a él y le digo:
+ El otro día empezamos con mal pie creo, tenías algo de prisa por el atraco que cometí de que en un cuarto de hora antes de cerrar tuvieras que atendernos con tantas dudas...y creo que...
Me interrumpe enérgico al más puro estilo Don vito Corleone (no estaba fumando pero de repente lo vi con gabardina mascota y todo en sepia con humo de tabaco en el ambiente), en un tono mucho más bajo del que se había dirigido a mi nunca me dice:
- Un momento Francisco, para nada hemos empezado mal a mi entender, es tan sólo que tu perfil está más que visto.
A la misma vez iba girando una ficha que había ido cogiendo mientras exponía en un todo hipnotizante y suficiente para escucharlo en una casetilla donde sólo estábamos él y yo y me dice.
- Esta es su ficha, usted no ha venido dos veces amigo, usted lleva interesado en esta zona de 15 a 20 años aproximadamente, primero en esta promoción, luego en esta otra y bueno por lo que fuese no llegó a cuajar la compra en ninguna de las dos ocasiones anteriores lo que me invita a pensar dos cosas, una que a la tercera es la vencida y esgrime una sonrisa sarcástica de incredulidad, o la segunda cosa que me hace pensar es que aunque le encanta la zona no termina de encontrar la manera de vivir en ella y donde usted ve mal comienzo yo veo pérdida de tiempo.En ese momento yo me quedo algo bloqueado solo que sin el algo y medio balbuceando logro encontrar posición de poder explicando un poco el recorrido de esas visitas (nueve en concreto)...
+ ¡¡¡Bueno!!! efectivamente me gusta la zona por cercanía a la zona de crianza sumada a la modernidad que representa de gente joven y mucha oferta comercial y de ocio y no le voy a negar que tanto mi mujer como yo tenemos ganas de vivir aquí pero no se han dado las circunstancias económicas ideales para poder hacer la operación si por eso mi perfil es de mal cliente disculpe usted por intentar que haga usted su trabajo. Y me quedo aguantándole la mirada en lo que ya era un duelo abierto de poca vergüenza y cartas encima de la mesa.
- Mire Francisco, ya le digo que vengo de vueltas de todo y lo que hago es quitar todo el proceso del medio para ahorrarle tiempo inútil a usted y a mi y de tirón lo llevo a la única realidad...que no es otra que en el mundo inmobiliario los números son de fango, los que te valen hoy no te servirán mañana y sí, no soy el comercial al uso que usted esperaba pero ya le digo yo que soy el que en realidad necesita para no hacer castillos en el aire y tengo la suficiente edad para poder decirle en confianza que primero venda tranquilamente y luego compre, sin ánimo de molestarle.
Total que el vendedor cabrón no sólo me ha vapuleado y se ha sacudido el polvo sino que me ha convencido de que su actitud en el fondo responde a algo positivo jajajajaj, y que como ya preveía la guerra mental era sólo mía...."the patetic men", ahora estoy en otra lucha, como hacerme amigo del gran Vendedor Cabrón...quiero que me enseñe su maestría en el ejercicio de la humillación sin exponerte a perder los dientes, ya lo veo hasta guapo dentro de lo mamarracho entiéndase, el guapo del éxito que yo diría, la seguridad del que puede parecer un pobre hombre al que puedes medio manejar pero nada más lejos de la realidad, es una araña gorda y negra...vale y calva de la que te atrae su debilidad para pisarla y cuando te das cuenta se te ha metido por el pantalón para arriba y estás saltando como alma que se lleva el diablo.
Como podréis observar he perdido contra mi mismo, así que yo también soy el puto amo en lo mio ... ¿cuanta gente puede decir lo mismo?...un saludo, os dejo hasta el próximo esperpento jajajajaja.











